Aprendí a aceptar que hay personas que se quedarán siempre en mi corazón, pero no en mi vida...
You and me up to the infinity...

jueves, 30 de mayo de 2013

Suicide...

Hoy no hay palabras de amor, palabras de apoyo o de ánimo que sean capaces de ayudarme a seguir adelante, hoy las cosas son distintas y siento que mi trayectoria en esta vida se acaba aquí... Esté corazón está cansado de recibir tantos golpes, de camuflar sus heridas y de hacer como que nada le importa; siento que lo único que hago es estorbar, ser un lastre para mis familiares, estoy cansada de seguir cargando con tantos fantasmas, de levantarme de cada caída, nadie sabe como duelen ciertas palabras excepto quién las soporta, quién día tras día las carga a sus espaldas e intenta levantarse con una sonrisa dibujada en la cara por mucho que haya pasado toda la noche en vela al no poder conciliar el sueño por todos esos fantasmas que día a día le persiguen. Me despierto sin ganas de otro día más con una rutina que poco a poco me va apuñalando; pero hoy será el último capítulo, un capítulo que escribiré sobre la hoja en blanco que me queda con la tinta de mi sangre... Pido perdón a todos los que en su día les fallé, a todos aquellos que decepcionaré con está decisión, pero tan solo pido que os leáis mi último escrito que entendáis que este pequeño corazón está cansado de continuar soportando palabras tan duras de las personas que más quiere que se le clavan como puñales, cada palabra es más dura que la anterior, palabras que crean enormes brechas difíciles de curar. Con cada nuevo corte siento que mi paz está cada vez más cerca, mientras tanto hablo con mi conciencia a solas, la verdad es que tengo miedo de decir adiós pero hace tiempo que siento que por dentro estoy muerta, pocos me creen pero hoy siento como rozo mi edén... Es el momento de despedirme de todos aquellos a los que quiero, siento ser cobarde para huir de está manera pero mis fuerzas están empezando a desvanecerse conjuntamente con mis últimas bocanadas de aire... Dudo que alguien logre calmar a está pequeña alma suicida, pero quizás unas pequeñas palabras de la persona más inesperada e incluso más querida logren hacerlo aunque quizás no llegue a tiempo... Lo siento por decepcionaros y por querer dejar de luchar con tan solo 19 años; pero el suicidio no lo veo como una cobardía sino como otra manera de ver las cosas, otra perspectiva distinta de cruzar al otro lado...

No hay comentarios:

Publicar un comentario